Rachel Shardlow se ha convertido en un caso milagroso.
La niña australiana de 10 años ha sobrevivido a la picadura de una medusa caja, que es una de las más venenosas del mundo.
Rachel estaba nadando en el Río Calliope, cerca de Gladstone - Queensland - Australia y allí fue sorprendida por el ataque de una medusa.
Comenzó a sentirse mal y su hermano Sam de 13 años, logró sacarla del río.
Ella no podía ver ni respirar y además perdió la consciencia cuando todavía tenía los tentáculos de la medusa enrollados en sus piernas.
Rachel es fruto de un milagro, ya que tal y como ha explicado Jamie Seymour, profesor de la Universidad James Cook y especialista en zoología y ecología tropical: "Cuando ví por primera vez las fotografías de las heridas, pensé que la niña no había sobrevivido, ya que cuando una persona es atacada por una medusa caja con esa cantidad de tentáculos lo más normal es que muera".
Este tipo de medusas inyectan un veneno tan potente que los que sufren una picadura de ellas se desmayan en el acto y acaban ahogándose.
Es el primer caso en el mundo que ha sobrevivido a una picadura de este tipo de medusa.
Algunos pueden llegar a sufrir un ataque cardíaco antes de llegar a la orilla.
Rachel pasó varias semanas ingresada y fue dada de alta, aunque los médicos siguen estudiando su evolución para saber si el ataque de esta medusa tiene efectos en su salud a medio plazo.
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