El pasado 1 de junio murió la lince "Morena" en el Centro de Cría en Cautividad de El Acebuche - Doñana. Tenía 20 años, récord de longevidad en esta especie.
Morena presentaba síntomas evidentes de deterioro físico y dolores intensos, por lo que los cuidadores tuvieron que practicarle la eutanasia.
La lince, fue uno de los ejemplares fundadores del programa de cría.
Estos animales suelen vivir unos 13 años.
Morena fue encontrada cuando era sólo una cachorrita en las inmediaciones del embalse del Encinarejo - Andújar - Jaén y desde aquel día ha permanecido en cautividad.
La criaron en el Centro de Recuperación de Especies Amenazadas (CREA) de Quiebrajano - Jaén y en abril de 1991 fue trasladada a la Estación Biológica de Doñana (EBD,CSIC), donde ya habían otros ejemplares.
En noviembre de 1992, se inauguró el Centro Experimental de Cría en Cautividad del Lince Ibérico de El Acebuche, en el Parque Nacional de Doñana y allí fue su último traslado, en el que ha estado 18 años.
Morena no ha tenido descendencia porque no habían machos óptimos durante su edad fértil. Aunque no era un ejemplar reproductor, ejerció durante sus últimos años un rol muy importante como nodriza de los ejemplares más nerviosos que ingresaban en el Programa de Conservación Ex-situ.
Llevaba varios años padeciendo algunos problemas debido a su edad.
Morena "ha sido y será un símbolo de la conservación del Lince Ibérico", según Ex-situ. Su conducta salvaje y su buen estado físico la convirtieron en la protagonista de numerosas filmaciones y fotografías. Con ellas se pudo sensibilizar a la sociedad sobre la necesidad e importancia de recuperar a este hermoso y único felino, que estaba desapareciendo de nuestros montes a una velocidad vertiginosa.
Su rostro es símbolo de numerosas organizaciones y muchas de sus fotografías han dado la vuelta al mundo en innumerables ocasiones. Este último año, una imagen de "Morena", se ha convertido en portada del informe Wildlife in a changing world, publicado por la IUCN, donde la lince aparece simulando salir de la niebla oscura, representando la esperanza y el esfuerzo de sacar al Lince Ibérico de la oscuridad que supone su extinción.
Los cuidadores de "Morena" publicaron una nota con los datos del ejemplar como homenaje y también por la satisfacción de haber cumplido el "compromiso adquirido de asegurarle la máxima calidad de vida durante el mayor número de años posibles y, en el momento que esta calidad no existiese, otorgarle el final tranquilo y digno que merece un ejemplar insustituible".
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