Esta patata salió de la huerta de Pedro Cases, un jubilado de 85 años apodado Perico "el Sebastián".
Dice que está acostumbrado a encontrar ejemplares curiosos o similares en sus cosechas, pero nunca había recogido una patata con forma de perro.
"Me impactó nada más verla. La separamos del resto de la cosecha y la llevamos a la casa como un "trofeo", pues la hemos expuesto en el salón".
Perico dice que una patata así no podía acabar en la cazuela.
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