Es lamentable que nos sigamos enterando de estas cosas, lo peor es que cada vez es más a menudo.
Es una época de cría para muchas especies por lo que esta matanza hace más daño que en otros meses del año.
Muchas de ellas son protegidas, como el buitre negro, milano real, entre otras comunes.
Se han encontrado en Cantimpalos, Yanguas de Eresma, Armuña y Roda de Eresma, en la provincia de Segovia.
La mayoría de los ejemplares que se han encontrado son rapaces: cinco buitres negros, dos buitres leonados, once milanos reales, dos milanos negros, un azor, seis busardos ratoneros, un aguilucho lagunero, tres cornejas negras, cuatro cuervos, tres urracas y dos zorros.
El 27 de marzo se produjo un aviso de un particular, que alertaba de la presencia de algunos cadáveres en la zona.
Los agentes medioambientales han rastreado toda el área y todavía lo siguen haciendo, "los primeros indicios apuntan a un posible caso de envenenamiento como causa probable de las muertes".
En estos casos de envenenamiento de fauna silvestre, según el protocolo, todos los ejemplares muertos han sido trasladados al Centro de Recuperación de Animales Silvestres de Valladolid, donde se ha procedido a realizar las necropsias de los cadáveres.
Se han trasladado también muestras al Laboratorio Forense de Fauna Silvestre, por lo que se esperan los resultados de las analíticas para confirmar la causa de las muertes.
El uso ilegal de cebos envenenados es una práctica algo habitual en esta zona a pesar de ser un delito según el Código Penal vigente.
La gravedad de estos hechos se aumenta porque en el lugar donde se han encontrado los cadáveres de los animales es la misma zona de alimentación de dos parejas de águila imperial y zona de campeo de buitre negro de la Sierra de Guadarrama, además de afluencia de otras especies protegidas.
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